La proyección de Mapa a la que había asistido el día anterior estuvo abarrotada de público. Los comentarios en la entrada o justo de antes de arrancar el cortometraje que da pie al filme y a la salida de la función, recordaban más a la irrupción masiva de un cantante que acabara de grabar su primer álbum – at last, como dice dulcemente la canción de Etta James que suena de despedida- tras años de patearse clubs con la única ayuda del boca a boca, que a un debut cinematográfico.
Sabedor ya de haber sido agraciado con uno de los premios del jurado, León Siminiani se sometía aquel sábado de clausura, saludando compulsivamente a un montón de gente que acababa de conocer (o que quizá ni conocía), a cuestionarios en serie de diez minutos donde se escuchaban más felicitaciones que preguntas, más ganas de saber de esa chica misteriosa, Luna, sobre la que gira y gira el film, que de plantear cuestiones técnicas.
Número cuatro
Nuestro tiempo: Festival de Cine Europeo de Sevilla
Ilustraciones: Ferdinand Jacquemort, Francisca Pageo