El frente, de El Cíclope Mecánico (Ediciones anómalas) | por Francisca Pageo
Ediciones Anómalas nos trae, de la mano del colectivo El cíclope mecánico, un hermoso fotolibro donde se retrata El Jebha -El Frente, en castellano-, un pueblo costero situado al norte de Marruecos, en las estribaciones de la cordillera del Rif, que fue bautizado como Puerto Capaz durante la época del Protectorado español. Así, El Jebha es y ha sido testigo privilegiado de la reciente historia de convivencia entre España y Marruecos. El fotolibro, pues, nos presenta este pequeño pueblo, haciéndonos partícipes de sus habitantes y costumbres, así como de sus paisajes y entornos.
Nos hallamos frente a imágenes muy sutiles de lo que la vida es y ha sido en El Frente. Hermosos blancos y negros, también fotos a todo color y diversos documentos recogidos por el colectivo, que nos detallan vivencias, viajes y paisajes, que hacen de las imágenes una hermosa historia que sus autores quieren que contemplemos. La cotidianeidad aparece en las fotografías y su humanidad las envuelve. De esta manera, el fotolibro se convierte en un imprescindible documento de lo que es la vida en la frontera entre España y Marruecos. Aquí, todo detalle es documento, y todo documento es experiencia.
Palpamos el enfoque humano que nos muestra el libro. Los habitantes de El frente son sus máximos protagonistas. Sus vidas se presentan tranquilas -o al menos así es como las podemos ver-, llenas de historias que contar, las cuales se plasman de una manera puramente visual y nítida; con una gran fuerza y poder visual que ya de por sí nos revelan las fotografías.
Según El cíclope mecánico, las fotografías no son el fin último de este trabajo, sino el vehículo en el que han viajado las emociones de sus protagonistas, antihéroes vecinos de uno y otro lado del estrecho. Así, la frontera que nos presentan es imaginaria; la delgada linea fronteriza se disipa ante la presencia insistente de la naturalidad con la que los habitantes hablan a través de las imágenes. La historia no cesa, los recuerdos, aquí, se hallan inmortalizados, eternos y libres de toda condición y limitación, pues los habitantes de El Frente responden amablemente a la presencia del colectivo. Creadores, estos últimos, de un gran fotolibro documental y conciso de la delgada linea que separa Marruecos y España; una linea casi inexistente, absorbente y cautivadora.